Ir al contenido principal

Otra vez es Año Nuevo

Otra vez se acerca el final de año. 
Y como cada final de año (adoro esta época) me pongo a mirar y remirar todas las cosas que han pasado desde hace un año. 

Parece que fue ayer cuando terminó el 2015.
Parece que fue ayer cuando escribí mis propósitos para este año. 
Y algunos se han cumplido, otros no.

Yo no podía llegar a imaginar lo que el mundo me deparaba este año.
Toda la gente maravillosa que he conocido, todas esas personas especiales que me han hecho tan feliz.
Mis amigos de siempre y para siempre, grocs, amigos de paso, amigos nuevos que llegan espero que para quedarse, mi peli-cúrcuma,  mis niños del esplai, los monis guaposos, mis primos maravillosos, mis papis, mi sista. 

Estoy muy orgullosa de mí misma. He conseguido cambiar muchas de esas cosas que no me gustan de mí. 
Y lo he hecho porque he querido. 
Con mi esfuerzo.

Ayer estuve hablando con mi profesora de yoga, (en realidad es profesora de mil cosas, pero siempre la llamo así) y me dijo algo que me encantó. 
Me dijo que se me veía muy feliz, que me estaban pasando muchas cosas buenas.  
Y que, a parte de vivir estos momentos, tengo que recordarlos. 

Por si viene otra mala época (mejor dicho cuando venga otra mala época) yo recuerde que fui feliz. 
Y que, si fui feliz, puedo volver a serlo. 

Comentarios

  1. Me alegro Maria, de ver como te haces mujer, y no me refiero a fisicamente, sino ver como maduras y sabes valorar las cosas buenas que la vida te ha puesto en el camino, eso te dara fuerzas para cuando tropieces con las malas. Un besazo.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Revolución 7 - Viaja sin moverte de casa

Esta revolución está pensada para relajarte. Debes visualizar un lugar tranquilo, ese lugar en el que te gustaría estar. Ahora mismo ya estoy relajada, quizás no tranquila, pero vamos, que mi vida no es un tren sin frenos. Primero, he empezado a buscar pisos en Airbnb (soñar es gratis, ¿vale?). Me encantaría viajar a Italia o a París, a un lugar lleno de tranquilidad, donde la gente hable una lengua distinta a la mía y que es música para mis oídos (de vez en cuando veo una película en francés así sin subtitulos ni nada sólo por el gusto de escuchar el idioma).  Luego he pensado que eso estaría muy bien, que sería muy relajante y me llenaría mucho. Pero... No es lo que más me apetece. Yo, cuando pienso en viajar pienso en coger un avión, o hacer un largo viaje en tren o en coche.  Pero, viajar con la mente es otro tema. Ahora mismo, viajando con la mente, donde más me apetece ir es  a bailar. Salir de noche, maquillarme, incluso ponerme tacones (unas botas de estas que si
Y volvemos a empezar. Se acabó el veranito, se acabó la playa y, admitamoslo, se acabó la diversión. Ha sido un buen verano. Un verano que nos ha servido a todos para crecer, para conocer a gente nueva, o bien para conocer mejor a aquellos que "ya conocíamos". Os deseo una vuelta a la rutina lo más indolora posible, y que la fuerza os acompañe.

Tics de Navidad

Barcelona amanecía como cualquier otro día de invierno cualquiera. El cielo se llenaba de tonos rojizos, tonos cálidos que contrastaban con las temperaturas. Los pájaros saltaban de rama a rama, despertando el día poco a poco con sus voces tan admiradas siempre excepto a esas horas intempestivas. Las calles, que siempre estaban llenas de gente, se encontraban vacías, excepto por algún trabajador que empezaba su turno. Y Àxel. Àxel, como cada día de Navidad, había madrugado mucho. Su despertador había sonado a las cinco y media de la mañana. Se había levantado con una sonrisa. Sin encender ninguna luz había atravesado su minúsculo apartamento. Había llegado al pequeño cuarto "de fotógrafo" que decía él. El día de Navidad era un día especialmente bueno para fotografiar el amor. La fotografía era su máxima pasión. Le encantaba ponerse detrás de un objetivo y capturar aquellos pequeños momentos que parecía que nadie más veía. Aquel niño que se reía sin sentido, aquella